-¡Dami! -Jonathan corrío hacia Damian pero está vez no lo derribó como otras veces -.¿Todavía te duele?
-Sí... Voy a tardar al menos dos semanas más en volver a la acción
-¿Seguro que podrás mantenerte quieto?
-Con Alfred y tú vigilandome para que no salga no tengo mucha opción
-Vaya, vaya, vaya, pero si es el Omega que se cree Alfa -El mismo niño al que probablemente Damian había dejado castrado volvió a plantarles cara.
-TT -Damian apretó los puños, estaba indefenso debido a sus heridas, podía patearle el trasero a ese niño pero entonces correría el riesgo de que se le movieran las costillas y le perforaran un pulmón.
-¡Dejalo en paz, Blake! -Jonathan sabía del estado de Damian, aunque sabía que después iban a discutir por esto, decidió protegerlo.
-Uyy, el pequeño Omega tiene a su Alfa, maldito marica -Se burló Blake -.Pierdete, el problema no es contigo -Empujó a Jonathan y alzó su mano hacia Damian, pero Jonathan lo detuvo agarrándolo de la muñeca con fuerza.
-No. Lo. Toques. -Lo empujó modulando su fuerza, lo suficiente para espantarlo.
Logró su cometido puesto que el niño salió corriendo, Jonathan respiró hondo y se giró para mirar a Damian, listo para que le gritara, reclamara y lo empujara lejos una vez más.
-Nada mal -Damian le dió palmaditas en el hombro y se dispuso a irse a su salon.
«¿"Nada mal"?» Jonathan miró en la dirección donde su amigo había ido y suspiró aliviado de que está vez no le haya peleado.
Pero los problemas vinieron después.
★★★
Había pasado una semana desde la amenaza de Blake, desde entonces Damian no volvió a ser molestado físicamente.
Sin embargo, en la escuela empezó a circular un rumor que se expandió como fuego.
Cada vez que Damian llegaba a la escuela para encontrarse con Jon, la gente susurraba, cada vez que almorzaban, la gente susurraba, cuando conversaban, la gente miraba, cuando se despedían, la gente murmuraba.
Damian al principio no le tomó mayor importancia, hasta que descubrió que era lo que tanto murmuraban. Sucedió mientras caminaba solo por los pasillos. Escuchó unos murmullos de unas chicas en un salón.
-¿Viste a ese Omega?
-¿Hablas de Damian? ¡Sí! Jajaja, no puedo creer que esté con ese Alfa
«¿De que mierda están hablando?»
-Ahora que lo pienso, Jonathan... Así se llama ¿No? -Esperó una confirmación y prosiguió -.Jonathan y Damian siempre han estado juntos... ¿Crees que Damian tenga la Marca
Damian apretó los puños, conforme más escuchaba, más rabia hervía dentro de su ser.
Por otro lado, Jonathan estaba esperando a Damian donde siempre para almorzar, pero él nunca llegó, preocupado de que su amigo se hubiera ido fue a buscarlo.
Buscó en cada aula, en cada pasillo, finalmente lo encontró en la azotea y soltó una suspiro de alivio.
-Damia- ¿Qué pasa? -Jonathan podía escuchar sus latidos alterados, estaba furioso.
Damian se giró para mirarlo y frunció aún más el ceño, en su mente pasaban todas las formas de matar a un kriptoniano, pero desistió de usar alguna con Jonathan.
-¿Que haces aquí, Jonathan Kent? -Jon miró a Damian con ojitos de cachorro regañado.
-¿Hice algo mal? ¡¿Es por lo del otro día?! ¿Lo de Blake? Iba a lastimarte, Dam-
-¡No es nada de esa mierda!
-¿Entonces por qué estás enojado conmigo? -Jonathan bajó la cabeza y las lágrimas se hicieron evidentes.
Damian finalmente dejó de apretar los puños y se acercó a Jonathan, este cerró los ojos, esperaba su grito, su reclamo, pero en su lugar, Damian lo abrazó. Jonathan quedó congelado, Damian nunca había hecho eso.
-¿Dami?
-Perdón... Es solo que está escuela es una mierda... Todo es una puta mierda -Jonathan abrazó a su amigo temiendo de que alguien lo hubiera atacado.
-¿Alguien te hizo algo? ¿Dijeron algo? Si alguien se atrevió a intimidarte solo porque ahora no puedes defenderte... Pondré en práctica tu entrenamiento -Damian soltó una carcajada y se apartó.
-Bueno, por desgracia ahora todo cuadra, maldita mierda -Dijo entre burla y frustración. Jonathan lo miró confundido, Damian tomó un respiro -.Andan murmurando que yo... Tengo una Marca...
-¡¿La tienes?! -Tomó a su amigo por los hombros.
-¿Eres idiota? ¡No!
-Ah... -Soltó un suspiro de... ¿Alivio?
-No tengo una Marca, TT -Apretó los puños.
-¿Tanto odias la idea?
-Como no te lo imaginas -Se sentó contra el borde y Jon se sentó a su lado -.¿Puedes hacerme una promesa?
-¿Cuál? -Jonathan lo miró con curiosidad.
-No dejes que nadie me marque, jamás... Nadie, no quiero ser... La posesión de un Alfa -Jon miró a su amigo, sabía por todo lo que había pasado y de dónde nació ese odio.
-... -Bajó la mirada y lo pensó un poco, pero luego abrazó a su amigo -.Lo prometo, promesa kriptoniana
-¿Promesa kriptoniana? -Frunció el ceño.
-Es algo de kriptonianos
-Te lo estás inventando -Jonathan soltó una carcajada.