Damian llevaba a su equipo a un pequeño almacén abandonado, había demasiados en Gotham y eso lo empezaba a colmar.
La operación era sencilla, tomaban la kriptonita, destruían las armas y explotaban el lugar. Y se mantuvo sencillo hasta que llegaron al último punto.
Esto no era un almacén, era la fábrica principal, si la destruían podían frenar y frustrar los planes de la Liga de los Asesinos.
Entraron y rápidamente notaron algo anormal, había mucha más gente y estaban por lo menos diez de los mejores miembros de la Liga.
-TT, Aqualad, cubre a Chico Bestia, Raven y Starfire van juntas, Kid Flash, desarma a los que puedas
-¿Y tú? -Preguntó Aqualad, Robin solo sacó una katana.
-Yo clausuraré esta fábrica
El equipo asintió y se dividió, todos confiaban en su líder, a pesar de ser un Omega y un arrogante, sabía cómo dirigir y en el fondo tenía un corazón de oro.
-¡Starfire a tu derecha! -Ella alcanzó a reaccionar a tiempo y lo esquivó gracias a la advertencia de Robin.
Damian se preocupaba por el equipo de verdad, de otra manera ni siquiera sé hubiera molestado en entrenarlos, para cada Titán tenía un entrenamiento y para el trabajo en equipo también.
Damian llegó a la sala de controles y se encargó de dejarlo arruinado, clavó sus katanas en lo hondo de sus circuitos del aparato y luego las saco de manera diagonal, finalmente dejó una R marcada en la pared como advertencia para la Liga.
-Vaya, vaya, vaya, pero si es la deshonra de la Liga... -Un Alfa que triplicaba el tamaño de Damian entró en la sala, se tronó los dedos y sonrió.
-¿Deshonra? A mis ojos solo veo un enorme peso muerto -Lo señaló con una de sus katanas.
El Alfa se enfureció y se precipitó hacia él, Damian lo esquivó saltando y dando una voltereta en el aire, esto fue aprovechado por el contrario que alcanzó su brazo en el aire y lo estampó en el suelo sacándole el aire.
Damian apretó los dientes y aprovechando su posición impulsó un poco con la cadera y junto los pies para darle una patada en la cara.
Damian tomó distancia y examinó al Alfa por todos lados, analizó sus posibles debilidades mientras escapaba de su agarre y golpes.
Pero hubo un descuido y Damian recibió un golpe, incluso él pudo escuchar algo romperse.
-¡Ahg! -Damian se sostuvo de la pared para mantenerse en pie.
-Jajaja, ¿Esta era la criatura que Talia presumía? -Tomó la muñeca izquierda de Damian y la rompió sin mucho esfuerzo. Damian se tragó un grito de dolor y controló rápidamente sus latidos -.Luego me encargaré de ti, pequeña ave -Clavó una daga en cada antebrazo de Damian para dejarlo pegado a la pared.
El Asesino le dió la espalda y se dirigió a la puerta, Damian apretó los dientes y haciendo un esfuerzo sacó su brazo de la pared, aún tenía la daga incrustada, sacó la otra daga de su brazo y luego con dolor debido a la muñeca se sacó la otra daga.
-¡Oye, idiota gigante! ¡No he acabado contigo! -Damian sostuvo su katana con la mano buena. El patán soltó una carcajada.
-Esta pelea está acabada -Sacó un arma y le apuntó directamente, Damian apretó su katana y se preparó para pelear.
-Si, acabó -Una voz fría se escuchó detrás del rufián, luego un golpe que lo dejó fuera de batalla.
Cuando el Asesino cayó, Damian pudo ver quién había venido y lo insulto en sus adentros, pues ya no pudo mantenerse en pie.
Jonathan lo atrapó antes de que cayera y rompiendo una de las reglas de Robin usó rayos X en él. Pudo ver las costillas y la muñeca rota.
-Hey, aquí hay o-No pudo terminar sus palabras porque Jonathan dejó a Damian suavemente en el suelo y se precipitó para golpearlo en la cara, dejándolo fuera de batalla.
Jonathan entonces pudo tener visión de la batalla de los Titanes, ya había acabado, volvió sobre sus pasos y recogió a Damian del suelo, cargándolo con suma cautela para no lastimarlo.
Se acercó flotando a los Titanes, ellos al ver a Superboy se sorprendieron, pero la sorpresa rápidamente se vió reemplazada por la preocupación al ver a Robin en sus brazos.
-¡¡ROBIN!! -Los Titanes gritaron al unísono, pero Jonathan se alejó para que no se acercaran.
-Dos de ustedes sabían que él los necesitaba... -Jonathan miró a los Titanes con frialdad y odio, luego salió volando del lugar.
★★★
Jonathan llegó a la Fortaleza de la Actitud y dejó a Damian en el ala médica.
-Damian... Despierta amigo... -Jonathan empezó a entrar en pánico cuando vió que Damian no despertaba. Entonces recordó algo.
°-Guarda esto, es un contacto de emergencia°
Jonathan sacó su teléfono rápidamente y marcó el número de Alfred, no tardó mucho antes de que contestara.
<¿Hola?>
<¡Alfred! ¡Soy Jonathan!>
<¡Damian resultó herido, tiene heridas en ambos antebrazos, la muñeca izquierda rota y tres costillas rotas>
<¿Que costillas y de que lado?>
★★★
Jonathan estaba sentado en una silla al lado de Damian, había hecho todo lo que Alfred le había dicho, pero no estaba seguro de si lo había hecho bien aún después de mandarle fotos a Alfred y que esté lo felicitara por su buen trabajo.
Sus manos agarraban fuertemente la tela del pantalón sobre sus rodillas, temblaba de preocupación e impotencia, habían pasado unas horas pero Damian no despertaba.
-Dami... Por favor -Jonathan contuvo las lágrimas.
Entonces un quejido se escuchó, Jonathan se acercó rápidamente para evitar que Damian se levantara.
-¿Jonathan? -Jon asintió rápidamente.
-Me alegra ver qué despiertas... Llevas 4 horas inconciente
-¡¿Cuatro horas?! ¡¿El equipo?!
-Los Titanes están bien, me aseguré antes de irme... -Damian dejó salir un suspiro de alivio, pero entonces fruncío el ceño y miró a Jonathan.
-¿Qué hacías ahí?
-Escuché tu corazón alterado
-¿Que te he dicho de-
-Luego escuché tus huesos romperse... Dami -Jonathan contuvo las lágrimas, Damian se quedó callado.
-Pudo ser peligroso, había kriptonita
-Pudo haberte matado... Dami, no me importaba, kriptonita o no, no podía quedarme de brazos cruzados después de escuchar... -Jonathan bajó la mirada.
-... Estoy bien
-No, no lo estás, deja de decir que estás bien cuando no lo estás
-... -Damian apartó la mirada y fue cuando se dió cuenta del vendaje y tratamiento de sus heridas -.Gracias... Jonathan
-¿Para que están los amigos? Por favor no hagas más locuras, Dami
-Tengo que cumplir mis misiones
-Entonces llévame contigo
-Jonathan ya lo habla-
-Damian... Por favor -Damian miró a Jonathan a los ojos, los ojos lagrimosos y preocupados del kriptoniano hicieron que Damian emitiera un suspiro de derrota.
-Esta bien
-¿Lo prometes?
-... Lo prometo
