Mientras tanto en otra parte del mundo justamente en la isla glacial, una pequeña cocker spaniel emprendía un viaje, junto con su fiel novio una pantera negra llamado Ignacio pero le dicen Nacho ambos venían abordando el tren mágico que levitaba entre las demás islas por medio de unos cristales especiales, cada cristal emitía un suave resplandor marcando la ruta que conectaba hacia las distintas islas, el tren se deslizaba con elegancia por esta vía invisible. Mientras tanto Olivia la cocker spaniel venía asombrada observando atravesó de la ventana viendo las nubes y ha la lejanía alguna isla por debajo que lograba apreciarse, era un bello paisaje entre nubes y los colores que reflejaban los cristales por debajo de las islas reflejando distintivos colores por la luz del sol, su intención era clara y constante que es disfrutar de cada parada para tomarse fotos con su pareja, además de convivir pero para su infortunio este nunca le prestaba atención porque andaba pegado a la laptop siempre.
[Interior del vagón del tren mágico – justo al hacer parada en Isla Ciudad de Oro]
El tren se detiene suavemente, el cristal bajo sus patas cambia de color a un dorado intenso desde la ventana, Olivia ve edificios brillantes, calles relucientes y un grupo de aves exóticas bajando del tren mientras otros animales, vestidos con trajes llamativos, suben emocionados.
Olivia (con una sonrisa emocionada, empujando suavemente a Nacho con su patita)
Olivia:¡Mira, Nachito! ¡La Isla Ciudad de Oro! ¿Viste ese zorro con sombrero? ¡Hasta trae una serpiente de bufanda! Esto es como estar en una postal —dice aun con gran entusiasmo mientras mueve su cola de un lado a otro—
Nacho (sin apartar la vista de la pantalla, tecleando con rapidez)
Nacho: Ajá… sí… brillante… Qué bonito. —dice en seco sin siquiera mirar a olivia—
Olivia (suspira, todavía intentando mantener el entusiasmo)
Olivia:Pensé que en esta parada podríamos al menos mirar un ratito por la ventana, ¿no crees? O tomarnos una selfie con ese fondo. ¡Parece una película!
Nacho (con tono distraído, ajustando unas gráficas en la laptop)
Nacho: Querida, es que tengo que terminar de programar el sistema para la feria, el escenario principal de Isla Bahía Dorada depende de esto… y hay algunos errores
Olivia (frunce el ceño, confundida)
Olivia:¿Feria? ¿Qué feria?
Nacho (finalmente la mira, como si pensara que ya lo había dicho antes y si lo había dicho antes pero Olivia no escucho)
Nacho: La de Isla Bahía Dorada, ¿no te dije? Voy a estar trabajando allá, es por eso que vamos.
Olivia (su expresión se apaga un poco)
Olivia:…Oh. Pensé que este viaje era para nosotros. Para descansar juntos. Para… no sé, tener un momento sin laptops entre medio.
Nacho (con tono tranquilo, como si no viera el problema):
—Bueno, sí vamos juntos, ¿no? Tú puedes disfrutar los paisajes, tomar fotos… y yo termino esto. Además la feria va a estar genial, seguro te gustara, hasta tienen helado en forma de peces, ¿No te encantan los peces?
Olivia (cruzándose de brazos mientras mira por la ventana):
—Sí. Me encantan. Sobre todo cuando se los come alguien más mientras trabaja.
Se queda callada un momento, afuera hay una pareja de zarigüeyas que se toman una foto abrazadas con las torres doradas de fondo, Olivia las observa en silencio, Después saca su celular y sin mirar a Nacho, se toma una selfie sola con cara de fastidio y le pone un filtro brillante.
Olivia (en voz baja, como quien anota una lista mental):
—Ok… Isla Esmeralda: selfie con nubes. Isla Árida: selfie con cactus. Isla Ciudad de Oro: selfie con novio ausente.
El tren comienza a moverse nuevamente y los cristales bajo las vías emiten un resplandor ámbar mientras se alejan de la Isla Ciudad de Oro.
Olivia revisa la selfie que acaba de tomarse. Le pone un filtro con estrellitas y un marco que dice: “Momentos dorados ”
Olivia (murmurando con sarcasmo tratando de que Nacho la escuche, mientras escribe un pie de foto para su historia que subió a Instapaw):
—"Viaje romántico con mi laptop favorita y su novio, Nacho."
Nacho no escucha. Sigue tecleando como si le estuviera contando secretos a su computadora.
Olivia (con voz algo teatral):
—¿Sabes qué me encantaría? Que la feria tenga un puesto donde devuelvan novios y te den un globo de consolación aunque sea un globo en forma de perrito…
Nacho (sin levantar la vista): —Mmm… creo que sí hay globos… lo vi en el mapa de la feria
Olivia (suspira con un leve gemido, exagerando):
—Ah, el amor moderno… Nada dice “te amo” como un novio que no te presta atención con su prioridad en el trabajo y completamente enterrado en el Wi-fi
Se queda mirando el corazón en la ventana que había dibujado hace rato, solo lo observa un momento más, luego lo borra con la manga de su blusa.
Olivia (medio riendo para sí):
—La próxima vez me vengo con alguien más, algo así como un cactus por lo menos no tiene Wi-Fi..
Nacho alza la mirada apenas un segundo, confundido por el comentario, pero Olivia ya está tomando otra selfie con cara dramática y una lágrima falsa dibujada con una app.
Finalmente el tren se detiene en la última parada para ellos, justo en Isla bahia dorada, Olivia toma su bolso y 2 maletas mas, que parecían que estaban a punto de estallar si esto era un viaje, definitivamente olivia se trajo toda lo que tenía en casa, a comparación de Nacho el solo llevaba una maleta y la mochila con documentos junto con su laptop.
Caminaron en silencio desde la central hasta una pequeña zona donde los taxis pasaban mientras Olivia suplicaba por ayuda ya que arrastraba sus maletas que parecían a punto de explotar pero Nacho ni sus luces
Nacho se le ve mirando su pantalla mientras caminaba
Nacho:Ya contacté al técnico de sonido de la feria me está esperando en el centro de convenciones.¿Te parece si dejamos las maletas rápido en el hotel y de ahí me voy directo?
Olivia (Cansada pero aún intentando sonar paciente): Sí… claro pero si me ayudas en esto rápido.
Llegaron a la fila de taxis y Nacho se detuvo frente a un mapa digital pegado a una pared. No
Nacho (Aun escribiendo): Hay dos hoteles cerca… Uno con desayuno y otro más barato pero sin Wi-Fi en las habitaciones.El primero parece mejor, ¿no? Aunque igual yo no voy a estar mucho por el trabajo
Olivia (cruzada de brazos): Vaya qué considerado.El desayuno que compartiré sola y la conexión al internet que no usaré porque no tengo un romance con mi laptop.
Un taxi se detuvo frente a ellos y Olivia con esfuerzo acomodó sus maletas en el maletero y Nacho no ayudó ya que él estaba en una llamada.
Nacho (cubriéndose un oído con la mano): Sí, sí, ya llegamos, en veinte minutos no menos como en 30 estoy allá solo dejo que mi novia se acomode en el hotel y ya ando con usted.
Cuando colgó Nacho se acerca al taxi.
Nacho (apurado): Amor tu te vas tú sola.Ya me están esperando así que diles en recepción que yo llego más tarde que guarden mi maleta nomas recuerda que es en el hotel “Bahía Dreams” está aquí cerca, el taxista sabe.
Nacho le besa la cabeza mientras se aleja
Nacho:Gracias amor te juro que después de esta presentación, soy todo tuyo…Bueno… Tal vez el 80% o 70% ande en el trabajo o depende de la máquina
Olivia (murmurando mientras sube al taxi): Lo único que estás presentando bien es tu ausencia.
El taxi arranca y Olivia apoya su hocico en la ventana mientras el coche tomaba una curva lenta entre palmeras y murales pintados con colores vivos.Bahía Dorada era hermosa así. Pero también era grande y estar sola en un lugar hermoso a veces hacía el vacío más evidente.
Después de dejar las maletas en la habitación del “Bahía Dreams”.
Vemos a Olivia frente al espejo dándose ánimo
Olivia:Vamos Olivia… cinco minutos de su atención no más.
Se peina como si fuera la escena final de una novela y eligió su vestido más llamativo uno con lentejuelas turquesa y se puso un labial rosa intenso y perfume de coco con maracuyá.
Bajó las escaleras con paso firme y salió directo hacia el trabajo de Ignacio donde vemos a este rodeado de cables y pantallas asi como gente apurada con credenciales colgando del cuello.
Cuando lo vio él estaba de espaldas escribiendo en dos teclados a la vez.Así que Olivia respira hondo se colocó bien el vestido saco el pecho con más ganas pues era escotado y tenía que hacerlo lucir y eso si para la cola con elegancia y se acerca con una sonrisa que mezclaba seducción y desesperación en partes iguales.
Olivia (con tono juguetón empujándolo con el hombro): Vamos Nacho digo Ignacio *le gime su nombre* tenemos muchas cosas que hacer aquí en la playa
Ignacio por unos segundos cae y pregunta de manera tonta e inocente “Como que cosas podemos hacer en el mar loquita”
Olivia:como castillos de arena, enterrarnos en la arena, esculpir sobre arena, hacer pasteles de arena, hacer caminitos con la arena.
Ignacio (Ahora desmotivado por escuchar eso): Ya te dije que me digas Nacho y ya te lo dije solo estamos aquí por negocios no para vacacionar.
Olivia (forzando una risa mientras gira frente a él intentando llamar su atención): También hay una cafetería muy popular en esta ciudad… ¡e incluso hay una discoteca bajo el mar! Va a tocar el fin de semana con los Cruz Rika.No sé quiénes son pero suena a que estará padre.
Ignacio no responde.En cambio se lleva una mano al audífono y habla con tono formal.
Ignacio: Diga jefe sí… ya tengo aquí toda la documentación que se le olvidó.Ahora en un segundo lo veo.
Olivia baja lentamente los brazos pero aún lo intenta.
Olivia: Hay un pabellón de cerámica y unos cenotes que son tan grandes que te pierdes en ellos.
Ignacio (mientras abre un mapa en su pantalla): Sí, ahorita le llegó en un segundo ¿en dónde está? solo deje veo el mapa y le caigo.Solo deme chance de localizarlo en la piedra y llegó.
Al ver que Ignacio no la topa esta se va caminando hacia la playa sin decir nada, sus pasos dejan pequeñas huellas en la arena húmeda.
Llega a la orilla se quita los tacones con cuidado y mete sus patas en el agua dándose cuenta que esta bien fria pero no tanto como las palabras de Ignacio
Se sienta sobre una roca y mira hacia el horizonte, nadie la interrumpe, nadie le responde.
Saca su celular y toma una foto al mar que se ve teñido de naranja por el atardecer y escribe:
Texto de la historia en Instapaw:
"Me vestí para él pero me gustó más cómo me veía sola."
Mientras tanto en ese mismo día en la mañana pero con las chicas, las vemos discutir luego de que Luar viera uno que otro producto no tan familiar para venderle a los comensales.
Luar: Oye Azul
Azul: ¿Qué Luar?
Luar: Porque si somos una cafetería trajiste alcohol
Vela: Acaso piensas emborracharnos y hacernos tuya
Azul: Que rayos dices Vela si compre eso es para los clientes que en estas fechas piden café con piquete no porque ande contrabandeando alcohol además ustedes son menores si las vieran manejando eso nos clausuran
Luar: Ahhhhh
Azul: Obvio que esos pedidos son en la noche cuando ya ustedes andan limpiando todo y yo atiendo a los últimos comensales.
Vela: Hay que alocarnos dame esa botella para aca
Vela le quita la botella a Azul y le mete un trago pero en cuanto le mete el trago lo escupe de inmediatamente
Viva: Pero qué es esto?
Azul: Es piña echada a perder es para el tejuino
Vela: Pero no es eso alcohol
Azul: Técnicamente así es como se hace el tejuino.
Vela: Está bien solo no me dejen cosas a la mano que no me controlo
Luar: Eso bebe alocate jajajaja no te creas Viva
Vela: Verdad bueno cambiemos de tema para saber que hacer el fin de semana pues debemos buscar algo que atraiga a los visitantes al local
Luar: Como que se les ocurre a ustedes
Azul:No se supone que compre un flamenco y un inflable para atraer, no es que sea tacaña pero no quiero andar gastando de más y lo terminamos desechando o guardándolo en el almacén.
Azul:Que les parece que usemos una botarga.
Luar:Pero de que?
Vela: Que les parece si usamos la botarga de café que está en el sótano y nos ponemos a bailar con la canción espresso
Luar: Esperen…desde cuando tenemos un sótano
Azul: Siempre lo ha habido, el detalle es que nunca vas porque una vez se te apareció una araña y desde ese día no te volviste a parar nunca.
Vela: Ese dia estuvo chistoso y solo dijiste que no harias como que existe
Luar:Ahhh ya me acordé………….. de qué estábamos hablando
Azul: Saben que mejor les doy el resto del día para que vayan a descansar y mañana a primera hora bueno luego de ir a la escuela vengan a trabajar porque mañana es el día de las promos y saben que eso significa que habrá billullo.
Olivia continua caminando por la playa y preguntándose a sí misma en su mente si algun dia Nacho dejara el trabajo aun lado y le prestara atención tanto como ella desea, se siente como si la relación fuera un charco de agua estancada donde no logra moverse, siempre estática y estacionaria, en ese momento le surgen otras preguntas; ¿esta relación realmente está funcionando? ¿Me siento feliz aquí? -dice Olivia murmurando mientras observa el mar que ahora refleja la luz de la luna haciéndolo algo sublime aun en medio de su propia tempestad que agita su mente
Nacho en ningún momento le ha enviado algún mensaje de texto en el transcurso del dia aun sigue ocupado, igual que siempre con el trabajo, aunque Olivia en ningún momento trata de comprenderlo, pero repentinamente justo cuando fue al muelle de las estrellas el teléfono de olivia vibro indicando que le han enviado un mensaje, rápidamente lo saca de su bolso, y si era un mensaje de Nacho.
Olivia:Si por fin tantas veces que te pedi una y por fin me dices algo
Al ver el mensaje solo lee la notificación de primer vista donde dice: “Perdon Olivia pero no creo salga del trabajo….” es todo lo que lee, sin detenerse y abrir el chat completo. Su expresión cambia. Sus labios tiemblan con una mezcla de rabia y decepción.
—¿En serio? — Olivia dice en un susurro.
Sin abrir el mensaje completo, deja apagado el celular, no quiere leer nada, ni explicaciones , ni excusas sólo el sonido del mar, ese sonido de las olas acompañándola, como si fuera lo único que realmente la escucha al menos según para ella.
Olivia guardó el celular con algo de torpeza, como si el simple contacto con él le quemara las manos no quería saber nada en ese momento. Se sentó en uno de los bordes del muelle, con las piernas colgando y los ojos clavados en el reflejo de la luna que flotaba, intacta, sobre el agua, había una parte de ella quería llorar, otra simplemente... estaba realmente furiosa.
Estoy cansada —susurró para sí misma, como si el viento pudiera llevar sus palabras a un lugar donde alguien realmente las entendiera y diera atención, hizo una pequeña pausa y continuo diciendo después de un suspiro—. De esperar y de aguantar todo esto.
Sentía que el amor se le estaba convirtiendo en una lista de excusas. De pronto, se escucharon pasos en la arena y llamó su atención, se giró, alarmada por un segundo… aunque con la ilusión de que pudiera ser Nacho a pesar de lo que dijo en aquel mensaje pero solo era una pareja caminando a lo lejos, tomados de la mano, riendo bajito, ese simple gesto, esa escena tan cotidiana, le caló hondo en el pecho.No por envidia, sino por la amarga certeza de que ella ya no recordaba cómo se sentía eso.
Suspiró largo y cerró los ojos y unas cuantas preguntas empezaron a formarse de nuevo en su mente. ¿Qué estoy esperando? ¿Una versión de Nacho que no existe… o que ya no quiere existir conmigo?
La brisa le acarició el rostro, como una respuesta muda. Esa noche ella regresó a aquel hotel donde se estaban hospedando, Nacho ya se encontraba dormido en el dormitorio aunque había un plato de comida y una pequeña carta en la mesa de la cocina pero Olivia no le importo siquiera verlo, solo se dispuso a volver a salir e ir al pequeño kiosko para comerse un pozole que tanto le gusta, no pensó en avisarle a nacho, lo dejo dormido