En el hiperespacio, el legendario carguero, el Halcón Ébano, la nave del redimido caballero jedi Revan se dirigía a su destino; dentro de ella, Atton, Kreia y Meetra iban a conversar sobre la situación
- Bueno. Ahora que acabamos de destruir un planeta o planetoide más bien, puede que alguien me diga qué está pasando aquí. En parte, los hologramas que vi junto a Surik en el Heraldo me aclaro algunas cosas, pero me pregunto si la anciana tiene algo que decir que de algo más de esclarecimiento. Consultó Rand a su par de compañeras para ver si podían aclarar sus incógnitas.
- Porque entre los droides asesinos, un lord sith que parece un cadáver andante y ser el blanco de práctica de una nave de guerra de la república y robada por el mismo lord oscuro, prefiero mi celda. Concluyó el chico coqueto, cruzado de brazos enojado, enumerando todos los riesgos que corrió hoy junto a las otras dos.
- Bien, para recapitular, la nave de la república era el Heraldo. Fue capturada por los siths de camino a Telos. Te buscaban, Meetra. Afirmó la mujer de cabello blanco diciendo lo que pudo ver en los hologramas junto Surik.
- Como decían en las grabaciones, el Heraldo se dirigía a Telos, ¿pero cuál era la razón? Dudó la chica castaña pensando en el motivo del por qué se dirigían para allá con ella en concreto.
- Sí, para colaborar en la restauración. Muchos caminos llevan a Telos, incluido el nuestro. Asumió Kreia a su alumna, la razón del porqué esa nave se dirigía para allá.
- Como si hubiera elección. Con las cartas de astronavegación de Peragus. Expreso Atton por no tener más opciones donde ir en su viaje.
- Es a donde debemos ir y a donde el Heraldo se dirigía antes de nuestro desafortunado encuentro en la estación minera. Simplifico la anciana a sus compañeros, dispuesta a ir a ese destino que, según habían previsto, para Surik.
- ¿Te importaría explicarme?, ¿Cómo me encontraste a mí a bordo de esa fragata de la república? Exigió la ex-jedi queriendo saber cómo exactamente pudo dar con ella.
- Me costó mucho encontrarte, pero la casualidad se puso de mi lado. Cuando supe que estabas en la nave, imaginé que los siths estaban asechando cerca. Cuando intercepté al Heraldo, estaba en ruinas, flotando a la deriva. Fue sencillo abordar la nave y rescatarte. Sin embargo, ignoraba que los sith ya estaban a bordo. Justo al saltar al hiperespacio, nos dispararon y estuvieron a punto de destruir el Halcón Ébano. Explicó la mujer de cabello blanco viendo cómo con la suerte logró encontrar a Meetra y los acontecimientos que pasaron luego de ello.
- Supongo que no recuerdo nada y la razón es lo que dijo el droide asesino HK-50 disfrazado de droide de protocolo, fui sedada con un jugo que tomé. Razono Surik recordando lo que dijo él autómata que eliminó a todos en la estación minera.
- Supongo que eso te dejó inconsciente. Aunque tus pensamientos eran débiles, fui capaz de hallarte sellada en una de las bodegas de carga. Explicó la anciana dónde encontró a Meetra cuando la buscaba.
- ¿Pero cómo el Halcón llegó a Peragus exactamente? Se cuestionó la ex-jedi con esa incógnita en su cabeza.
- Eso no lo sé, ¿cómo logro llegar nuestra nave a la estación minera? Se preguntó a sí misma Kreia cómo pasó eso exactamente.
- ¡Bii-diit! ¡Biiii-uooop! Interrumpió él automata utilitario diciendo que él sabía cómo era posible que llegaran a Peragus.
- ¡Silencio! Estamos manteniendo una conversación. Exigió la cabello blanco al droide para que no lo interrumpiera.
- Biriiiiduooo, bi-di-diit. Diit. Argumentó el ser mecánico diciendo que él fue el que logró reparar y poner en orden el carguero para que pudiera ir a la estación.
- Dice que él reparó la nave y nos llevó a Peragus. Explicó Meetra traduciendo lo que quería expresar el robot.
- ¡Qué reparó la nave! Y ahora querrá llevarse todo el crédito por salvarnos el pellejo. Se quejó Rand sospechando las intenciones del autómata.
- Si ese montón de chatarra, reparo la nave una vez, que pruebe a hacerlo de nuevo. Exigió el chico castaño a T3-M4 para que probara su valía.
- Duooooo. Se quejó algo el droide viendo la exigencia del compañero de su ama.
- ¿Y por qué me buscan esos siths? Dudó la chica castaña, preocupada por la situación peligrosa en la que se encontraba.
- Porque eres la última de los jedis. Cuando caigas, ellos habrán vencido. Concluyó la anciana la razón del porqué quieren eliminarla.
- Pero yo fui expulsada de la orden Jedi o eso, recuerdo. Reclamó la Ex-jedi, dando a entender que en las lagunas de su memoria podía recordar fugazmente que ya no era parte de esa orden.
- Expulsada o no, los siths creen que eres una dama jedi o tienes las enseñanzas de ellos en ti, y eso es lo que importa. Concluyó la de cabello blanco, dando a entender que Surik era quizá la fugaz esperanza de poder volver a restaurar la orden casi extinta.
- ¿Cómo que soy la última, jedi? No puede ser posible, la guerra civil debió matar a muchos, pero no a todos. Aseguro la ex-jedi pensando que debieron quedar varios jedis con vida luego de la contienda.
- Lamentablemente, ese conflicto eliminó a la gran mayoría, apenas solo quedaban cien caballeros. Muchos cayeron en combate y, así como otros, fueron seducidos por las enseñanzas de Revan. Informó Kreia sobre la desafortunada situación que tenían ahora.
- Por lo que recuerdo, deberían existir en Dantooine y los de Coruscant, ¿verdad? Dudo la chica de cabello castaño pensando que podrían quedar algunos de ellos.
- La academia jedi en Dantooine fue destruida por Darth Malak y ahora no es más que un cráter que resuena con los fantasmas de maestros muertos. Y el templo Jedi de Coruscant está vacío. Las aguas de la sala de las mil fuentes están quietas, en honor a los jedis caídos… y ahora los perdidos. Muchos jedis culparon a las enseñanzas de los maestros jedi de la caída de Revan y la guerra civil que se desencadenó. Expuso la anciana la terrible actualidad en que se vivía ahora.
- Si hay supervivientes, tenemos que avisarles. Razono Meetra queriendo buscar la ayuda y el apoyo de los pocos jedis que quedaron con vida.
- Quizás, pero ya no son jedi. Aunque los siths no los hayan eliminado, no te ayudarán, ni tú podrás ayudarlos a ellos. Explico la fémina de cabello blanco sobre la imposibilidad de hacer cooperar a los sobrevivientes ex-jedis o posibles jedis remanentes.
- ¿Entonces cómo detenemos a los Sith? Consultó la ex-jedi viendo que su maestra no le daba ninguna opción para luchar.
- Esa… No es una pregunta fácil de contestar. Esta amenaza es mayor de lo que crees y no creo que sea una batalla que pueda librarse. Cuestionó la anciana, dando a entender que no podían superar esta contienda.
- ¿Y qué opinas que deberíamos hacer? Preguntó Surik sin saber qué hacer en esta situación y queriendo saber qué opción le podía dar.
- Oye, basta ya de hablar en plural. Se quejó Rand queriendo que no lo involucraran en este asunto.
- No podemos esperar triunfar contra ellos en solitario. Para detenerlos, necesitarás armas, aliados y una maestra. Aunque temo que no será suficiente. Razono Kreia argumentando que necesitaban los medios para luchar contra los siths.
- ¿A qué te refieres? Preguntó la chica, de cabello castaño, sobre de que quizás no podrían triunfar al final.
- Tú luchaste en las guerras mandalorianas y perdiste todo. ¿Estás dispuesto a sacrificar de nuevo tantas cosas? Cuestionó Kreia queriendo saber si estaba dispuesta a arriesgarse esta vez.
- Yo decidí pelear en las guerras mandalorianas, haré lo mismo ahora, incluso si pierdo todo otra vez. Afirmó Surik determinada sin importar el resultado de su contienda.
- No me estás prestando atención. Este es un campo de batalla desconocido para ti. Considera con cuidado la elección. Si optas por luchar, si optas por la guerra, has de saber que es una senda que pocos dejan una vez tomada. Conlleva un precio terrible. Y al final, puedes encontrarte con que no te queda nada que sacrificar. Expuso la anciana cuestionando lo que iba a realizar Meetra y qué consecuencias como riesgos traería eso.
- Ya no tengo nada que perder, ni siquiera tengo mi memoria intacta, ¿qué podría pasar? Afirmó la ex-jedi determinada a lo que quería hacer ahora.
- Como tantos otros jedi, oyes pero no escuchas. Tienes mucho que aprender. Pero ya hemos hablado bastante, y me duele la herida. Si tienes más dudas, búscame en el camarote de la tripulación. Allí seguiremos nuestra charla. Se quejó Kreia viendo la actitud imprudente, la chica castaña con sus delirios heroicos.
- Eh, no dejen sus interminables y aburridas divagaciones por mí. Me estaba quedando dormido. Agradeció Atton de forma sarcástica, quien estaba algo cansado de la conversación entre las usuarias de la fuerza.
- Además, en privado, no tendremos que aguantar las opiniones imbéciles e idiotas, por suerte. Se alegró la mujer de cabello blanco mientras insultaba la actitud de su compañero Atton, mientras ella se marchaba de la cabina por su lado.
- Mira, eh… No es que me importe ni nada, pero igual deberías ir a ver a nuestra pasajera. Especialmente por lo de su mano. Pidió el chico castaño a su socia para que viera la condición de Kreia.
- Tienes razón, tal vez necesites ayuda. ¿Puedes ocuparte de operar la nave? Pidió Surik amablemente al chico castaño, sobre tripular la nave.
- Estamos en piloto automático hasta Telos. Hasta entonces un droide podría pilotar este trasto. Además, creo que a nuestra pasajera le vendría bien tu apoyo. Sugirió Rand sobre ir a acompañar a Kreia en este difícil momento.
- ¿Por qué dices eso? Dudo la chica de cabello castaña estando lista para ir a verificar el estado de su compañera.
- ¿Estás ciega? Si fuera ella, estaría gritando como un mynock (Los mynocks eran una de las pocas especies capaces de vivir en el vacío espacial. Sus cuerpos tenían 2 alas similares a las de los murciélagos, que les permitían volar en atmósferas, solían adherirse a las naves espaciales que pasaban para morder los cables de alimentación, debido a que su alimentación era de energía eléctrica, electromagnética, así como estelar. La energía era absorbida por una gran boca con forma de ventosa, ubicada entre los pedúnculos oculares) herido, un mynock muy fuerte y varonil. Creo que es demasiado orgullosa para mostrar debilidad… Especialmente delante de ti. Expuso el chico castaño a su socia sobre la actitud de la anciana en esta situación y cómo se debería sentir para sus adentros.
- Qué curioso. Concluyó Surik sobre Rand y su punto de vista de lo que le pasaba a Kreia.
- Por si no te has dado cuenta, a mí ni me dirige la palabra. Pero contigo habla por los codos en cuanto tiene ocasión. Tu opinión le importa… y mucho. Quiere que la respetes. Además, hasta Telos tampoco tenemos mucho que hacer. Aseguro el chico coqueto a su compañera sobre el asunto de la mujer de cabello blanco.
- ¿Desde cuándo tienes sentimientos? Bromeó Surik con sarcasmo, viendo cómo este se preocupaba mucho por Kreia.
- Eh, no vengas con esas. Solo hay que estar con la gente para comprenderla. Deberías intentarlo algún día. Razono el chico castaño aclarando su punto de vista.
- Vale, iré a ver cómo está. Declaro Meetra dispuesta a ver a su maestra.
Antes de ir al el pasillo unido a la cabina de mando del navío, pudo ver el sistema de astronavegación que estaba, por desgracia, estaba bloqueado. Luego fue por el pasillo y pudo ver una desviación a la izquierda que daba un cuarto con consolas, donde vio al pequeño droide utilitario haciendo mantenimiento a los circuitos de una pared y decidió dirigirle la palabra al autómata.
- ¿Dii-diiit? Consultó el ser mecánico a la ex-jedi queriendo saber qué necesitaba.
- T3, ¿qué le pasa exactamente al sistema de astronavegacion? Consultó Meetra dudosa por esa incógnita, queriendo saber el estado de ese sistema.
- Dii-dii... Dri-biii-driit. Explico el robot que bloqueó el sistema de astronavegacion.
- ¿Lo cerraste? ¿Para qué o por qué? Dudo la chica de cabello castaño desconcertada por esa acción de su camarada.
- Dii... Diit. Respondió confesando que lo hizo para proteger algo que debe ocultar.
- ¿Proteger? ¿Proteger a quién? ¿Por orden de quién fue eso? Consultó intrigada la ex-jedi pensando en quién podría ser el que le dijo a este automata que hiciera eso.
- Diii-riit, dii-diiit. Diiiit. Explicó T3 diciendo que un viejo amigo le pidió ese favor y que no le dijera a nadie a dónde fue o quién fue él.
- ¿Un viejo amigo? ¿Y este no quiere que nadie supiera dónde había estado el Halcón? Dudo Surik aún más desconcertada al no saber quién era aquel, le ordenó al droide hacer eso.
- Dii... Diit. Siguió dando contexto el droide sobre sus acciones y explica sobre que su viejo compañero fue a un lugar muy riesgoso y por ello el sistema de astronavegación de este carguero fue alterado para evitar poder saber dónde estuvo el mismo.
- Así, tu amigo, por alguna razón fue ese lugar peligroso y el sistema de astronavegación fue saboteado para que nadie supiera dónde estuvo con anterioridad este navío.
- Dii... diit. Informó el pequeño robot, aclarando que él volvió con el carguero, dejando a su antiguo socio en ese lugar peligroso.
- ¿Pero cómo este navío pudo volver de ahí, si eran tan peligrosos? ¿Podrás a volver a verlo? Y, ¿Y por qué te fuiste de su lado? ¿Y tú estabas en el Halcón con Kreia? Cuestionó Meetra muy desconcertada por todas esas dudas e incógnitas en su mente.
- Dii... Diit. Respondió el droide confirmando lo que sospechaba la chica castaña.
- ¿Pero de dónde vino esta nave? Especifico su pregunta al pequeño ser mecánico.
- Dii-riit, diit. Respondió T3 de forma esquiva a su socia, intentando alejarse de ese tema.
- Estás evitando responder a propósito. ¿Por qué? Consultó intrigada del motivo de lo que no podía o quería responder.
- Duooooo. Confirmó el robot diciendo que tenía protocolos y configuraciones para evitar que pudiera decir lo que ella quería saber.
- Déjame comprobar tu núcleo. Tendré cuidado, te lo prometo. Sugirió la ex-jedi de forma amable al droide.
- ¡Biii-diiit, bii-riiii! ¡Diiit, diit! Cuestionó T3-M4 preocupado como dudoso de lo que podría pasarle por la intervención de ella.
- Quiero asegurarme de que estás bien. Déjame revisarte, ¿de acuerdo? Apágate un momento, solo tardaré unos minutos. Volvió a proponer Meetra al robot con una sonrisa amigable.
- Duooooooooo. Confirmo listo el robot para la revisión por parte de su socia.
Cuando la chica de cabello castaño con sus herramientas en T3 logró completar el procedimiento con éxito, con ello el automata reprodujo un holograma de una bella mujer humana adulta, de tez clara, ojos azules, la que dice lo siguiente
- T3, tú estás con nosotros desde Taris. Sin ti nunca habríamos escapado de aquel lugar… y por eso te doy las gracias. Voy a dejar este mensaje en tu interior porque he tenido una visión del futuro… y el vínculo que nos une a él y a mí no le permite ocultármelo todo. Ha recuperado más recuerdos y eso le atormenta. Ha recordado algo, algo en el límite de la galaxia, y cree que debemos ir allí a terminarlo. Pero temo por él… Temo que no regrese. Necesito que seas su baliza, T3. Si se pierde ahí fuera, en el límite de la galaxia, si encuentra alguna de las terribles cosas que ha visto, es posible que no sobreviva. Si no vuelve, necesito que vayas a la República a pedir ayuda. Si no me encuentras, busca a otro jedi, la República… No puedo perderlo, aunque él crea que me está protegiendo. Expuso la mujer al autómata, ordénale al droide que busque apoyo para poder encontrar a su querido.
- ¿Esto es lo que intentabas ocultar? Consultó Meetra intrigada, viendo que su querido compañero escondía esto.
- Dii-diit. Respondiendo robot que su programación no le permite mostrar esto.
- Entiendo. Eso de tus protocolos ya lo sé, pero no sabía que guardabas mensajes como este. Afirmo desconcertada por la revelación de algo como esto en la memoria de T3.
- Dii-diiit. Lamento el automata por no poder haberle dicho antes sobre esto.
- ¿La persona del holograma es amiga tuya? Indago, la ex-jedi intentó saber si ya la conocía y si le tenía cariño.
- Bii-diit. Dii.... dii, dii-riiit, diit. Diit..... diit. Aseguro el ser mecánico diciendo que la mujer del holograma es Bastila Shan la esposa de su amigo, y resulta que ese amigo, ese viejo amigo del que habla el droide era Revan, así como la persona a la que se refería la mujer, era el mismo.
- Espera un momento. ¿Tu amigo es Revan?, ¡Mi viejo maestro! Pero no sabes dónde está, ¿verdad? ¿Qué le pasó? Sospechó algo deprimida, Surik pensando en el destino, su viejo maestro y viendo que su amigo droide no estaba junto a él.
- Dii.... Diit. Diit. Contestó T3 aclarando que el heroe debió irse por su lado para enfrentar una terrible amenaza y no quería involucrar a sus seres queridos en ello, por ello le borro la memoria de su paradero.
- Y si él no volvía. Tenía que asegurarse de que nadie iría tras su rastro, para no poner en peligro a nadie, pero parece que Bastila su amada, te puso esa programación para buscar ayuda, para encontrar a su amado. Concluyó la ex-jedi deduciendo lo que quería hacer su viejo maestro y lo que realizó la pareja de él.
- Pero lograste dar conmigo, la vieja aliada de Revan ¿Aún crees que puedo hacer algo? Dudo la chica de cabello castaño esperanzada, dispuesta a hacer lo que sea para salvar a la galaxia.
- Dii-diiit. Afirmó el ser mecánico diciendo que con suerte logró dar con ella.
- ¿Pero por qué yo? No podía hacer nada, antes había perdido mi conexión con la fuerza, por suerte gracias a Kreia la recuperé, aún es débil y ahora perdí la memoria, no recuerdo todo aún. Aseguro Surik algo desanimada y desesperanzada, confesando que quizá no sería capaz de vencer a los males presentes ahora.
- Diiii-diiit. Driiiiii-diii diiit. Expuso T3 explicando que necesitaba algún viejo conocido cercano a Revan para que con sus habilidades en tantas aventuras junto a él.
- Necesitabas a alguien lo bastante fuerte para hacer frente al peligro que asecha. Alguien que conociera a mi maestro, como también las guerras mandalorianas, que pudiera tomar las decisiones difíciles que había que tomar, o sea, ese otro yo que no recuerdo. Concluyó Meetra viendo las esperanzas e ilusiones del pequeño automata de que ella quizá podría ayudarla.
- ¡Me honras! T3. Quizás perdí mi memoria, pero gracias a Kreia pude volver a tener mi poder de la fuerza. Con el apoyo de ella podré recordar cómo fortalecer mis poderes como habilidades, para así ser suficientemente fuerte para parar a los siths. Se animó a sí mismo la ex-jedi determinada que podría volver a recordar quién fue ella y sus capacidades.
- Debemos enfocarnos en derrotar a los siths y luego podremos buscar a Revan. Razono Meetra dispuesta primero a hacer frente a la amenaza presente ahora, luego se podría a intentar saber dónde fue su maestro.
- Diii diiiit. Razonó diciendo que primero debían detener la oscuridad aquí y luego podrían ir tras el rastro del desaparecido jedi.
- Quizás un poco de mantenimiento de rutina. ¿Te importaría si intento mejorar tu núcleo de memoria? Sugirió la chica de cabello castaño barajó esa posibilidad.
- Druuu-uoooo. Aprobó el droide utilitario dispuesto a que su amiga lo revisara.
Con éxito logró reparar al droide al menos un poco más hasta donde podía
- Driit. Respondió él automata positivamente, siendo como sentía que su cuerpo había sido mejorado en cuanto a su capacidad de procesamiento.
Surik recordó que tenía la habilidad de la fuerza llamada: miedo, la cual le permite desmoralizar a sus enemigos de manera leve y logró recuperar más de sus antiguos poderes
Luego la ex-jedi fue a una consola con la que podía ver las cámaras de seguridad viendo diferentes zonas del navío
Entre ellas el almacén donde vio a un droide humanoide naranjo rojizo apagado y con fallas en su cuerpo, así como Kreia meditando en el camarote de babor, salió de esa sala y se fue por el pasillo hasta la sala central del Halcón, donde vio múltiples pasillos en diferentes direcciones, así como pudo mirar una compuerta cercana por donde vino y la abrió, pudiendo ver al mismo automata que vio por las cámaras
La chica cabelló castaña, estando más cerca, pudo contemplar mejor que era una unidad HK, pero más antigua como algo oxidada que con la que me enfrenté en Peragus.
Meetra al revisarlo, pudo notar que su núcleo energético aún tiene una carga, pero carece de algunas piezas fundamentales
Surik fue donde el droide utilitario para hablar sobre él automata
- ¿Sabes de dónde ha salido ese droide HK de la bahía de carga? Consultó Surik desconcertada de dónde vino ese ser mecánico.
- Dii... diit. Explicó T3 diciendo las razones por las que tenía a ese automata aquí y queriendo restaurarlo.
- ¿Intentabas reconstruirlo?, ¿Por qué exactamente? Indago Surik curiosa y desconcertada por las acciones de su camarada.
- Vri, diid-illt - duooo, diit. Dii-riii. Informo el ser mecánico especificando para qué lo quería reparar.
- ¿Para protegerme? Pero es un droide sicario; es peligroso. Preferiría que me ayudaras tú y ya está. Cuestiono la ex-jedi preocupada, lo que podría provocar dicho robot, si fuera reactivado y puesto en pleno funcionamiento.
- Dii-riiit, Diit. ¡Di-riiit diiit, dii-riiit! Se justificó T3 exponiendo su punto de que, si lo modificaban y reprogramaban, podían hacer que la obedeciera a ella y sin problemas.
- Sé que el comportamiento de un droide depende de las órdenes de su amo. Razona la chica de cabello castaño viendo el punto de vista lógico de su camarada robot.
- Diiiriiit diit bii-diit, dii-riit. Afirmó el droide utilitario confirmando lo que dijo Surik.
- De acuerdo, de acuerdo. ¿De dónde lo ha sacado? Preguntó ex-jedi queriendo saber la procedencia del ser mecánico.
- Driii-viit, dii-diit. Responde T3 diciendo que en alguno de sus viajes pudo encontrarlo, pero le faltan piezas.
- Encontré un vocalizador de un HK-50, me pregunto si puede encajarla en el droide que tienes aquí y quizá si busco con mercaderes de piezas, podré dar con el resto de ellas. Concluyó la chica de cabello castaño pensando en esa posibilidad.
- Duoooooo. Afirmo T3 comunicando que es posible que esa pieza pueda funcionar en ese modelo más viejo.
El droide utilitario revisó al autómata y T3 le informó que a este droide le faltan componentes muy relevantes: su procesador, un chasis de repuesto, el grupo de control que debería ir en el chasis y su vocalizador
- Supongo que esa pieza que recolecté podría funcionar aquí. Supuso Meetra a su camarada robot para ver si podía usar esta pieza para usar esa parte.
- Duooooooo. Afirmó él automata, dando la posibilidad de que sí podría usar esa pieza para poder completar a HK.
Ambos el droide como la ex jedi lograron poner el componente exitosamente en el droide averiado y luego se separó de su compañero para ir por su cuenta, fue explorando la nave hasta que llego a la bodega de carga donde encontró un almacén y usando sus habilidades de cerrajería pudo ver los siguientes objetos dentro del mismo: un escudo de energía, 95 créditos, una pica de fuerza, un medpac avanzado, una carta de pazaak +/-3 y una túnica jedi
Surik caminando por los pasillos, fue hasta el camarote de babor de la nave, donde pudo ver a Kreia meditando con tranquilidad. La ex-jedi le llamó la atención a la anciana, la que se levantó de donde estaba y se giró para mirar a su aprendiz
- El fin -