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Persona 5 Royal: gemelos en rehabilitación

Galvarino
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Synopsis
Ren y Akira jamás habían esperado tal cambio en sus vidas. aunque las vida los golpeó día tras día, decidieron seguir su corazón y su propia justicia e ideales. pero si su justicia hacia bien para aquellos sin voz, no les importa si ellos se llevan el peor golpe, no dejarían de defender a aquellos que no pueden, ellos no tenían a alguien pero eso no significa que apartan la vista.
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Chapter 1 - Capítulo 1: negro y blanco; crepúsculo y alba.

Capítulo 1: negro y blanco; crepúsculo y alba.

En el pueblo de Yamagami con tres mil habitantes, había dos pequeños niños jugando en su habitación compartida la cual tenia una cucheta donde el mayor de los dos, dormía arriba y el menor en la de abajo, en esta había colecciones completas de peluches como Jack Frost, tigres, elefantes, y demás.

En la habitación, la apariencia de estos dos niños era como clavos sobresalientes, uno tiene el pelo negro como la obsidiana que comienza a rizarse, con llamativos ojos grises oscuros, de una piel blanca como la leche, por otro lado, su gemelo menor era totalmente opuesto a él, de pelo blanco que también comienza a rizarse y de unos prístinos ojos celestes.

Sino fuera de que su gemelo menor tenia estos rasgos diferentes ni siquiera su propia madre podía diferenciarlos al principio.

Ellos eran Ren Amamiya y Akira Amamiya, gemelos con pocos segundos de diferencia y ahora mismo estaban jugando a las escondidas pero sus escondites eran simples, solo usaban los muebles más grandes de la habitación que poco a poco comenzaron a jugar en toda la casa.

El par quedaban casi siempre solos en casa, lo cual sus padres le compraron consolas de juegos, juegos de mesa, cartas, y demás para que no se aburrieran y que por suerte ellos atinaron en los gustos de ellos debido a que incluso se olvidan de comer a pesar de que su madre les preparaba todo tipo de comida, sin embargo, los cuatro no desaprovechaban y comían como si fuera una cena como cualquier otra.

Pero sus juegos o la mayoría de ellos involucraban juegos de roles y entre esos juegos estaba el rol de ser un héroe de la justicia, haciendo que la gente que comete acciones malas o quebrantaban la ley fueran a la cárcel debido a que sus acciones perjudicaban a la víctima, en otras palabras, ellos querían ser la voz de los que no tienen.

Y al estar solos en los primeros años de su vida sus valores, convicciones e ideales se convirtieron en sentimientos que se arraigaron en lo profundo de su ser y que protegían sus espaldas, pero lo mas importante que ellos creían es que se tenían el uno al otro.

A la edad de tres años al fin pudieron ingresar a un jardín de infantes, conocieron docenas de niños de su edad, innumerables ideas de juegos en conjunto hicieron que cada compañero de clase se uniera e incluso a los más tímidos.

El tiempo pasaba y su inteligencia o comprensión de las cosas hicieron que se percataran de lo que sucedía a su alrededor y en especial cuando se trataba de sus padres, poco a poco sus personalidades extrovertidas comenzaron a disminuir en decibeles, sus constantes búsqueda de encontrar a sus amigos para jugar fue un reflejo de eso e incluso comenzaron a ser un poco mas callados con el correr de los días.

A medida que crecían, sus actos infantiles fueron desapareciendo, jugar a la pelota, escondidas, los parques infantiles o incluso los pasamanos desaparecieron de su agenda infantil, y con ello también entendieron del porque sus padres desaparecían por días debido al trabajo, sabían que si no trabajaban sus estómagos estarían vacíos o no tendrían sus juguetes que tanto usaron de pequeños.

Ahora entendiendo la situación comenzaron a permanecer callados, empezaron a escuchar de forma mas continua e incluso vieron el panorama general de sus vidas y el de sus padres, ahora Ren no solo tenia que cuidar de su gemelo menor, sino que tenía la obligación de cumplir su rol de ser el hermano mayor de los dos y la posición de su familia, lo cual casi siempre se ocupara de Akira desde desayunos, ayudarlo con las tareas y demás.

Sin embargo, su gemelo menor tampoco se quedó quieto, él comenzó a ayudar en la casa, como limpiar los trastes, el piso, las habitaciones, el baño, los espejos, la cocina, en todo lo que podía hacer ayudaba dando una mano a su madre quien ella al llegar solo necesitaba cocinar y luego dormir debido a que Akira era el encargado de limpiar, pero en el fondo se decía a si mismo de que no quería ser una carga tanto para su hermano como para el resto de la familia.

Pero sus vidas tuvieron un cambio rotundo debido a que por casualidad escucharon unos comentarios cuando iban a comprar jugo para ellos mientras estudiaban, vieron a tres vecinas hablando tranquilamente en la calle, pero al estar en una esquina no notaron a los gemelos ni escucharon sus pisadas.

"pobre Ayumi, tan joven y hermosa diagnosticada con depresión postparto e incluso escuche que ella en el trabajo tiene crisis nerviosas" dijo una de las mujeres mientras bebía té que fue hecho por una de las amigas reunidas.

"incluso esos niños son problemáticos, siempre resaltando en lo que hacen, estudios, deportes e incluso juegos, son todo lo contrario del inútil de su padre Hiroshi." Dijo otra señora quien solo suspiraba de decepción de no haberle tocado tales hijos.

"no saben de lo que me entere, en un rumor a voces, pero se cree que Hiroshi no es el verdadero padre de los hijos de Ayumi, solo miren a esos gemelos, son una copia exacta de esa mujer, pero ni una pizca de ese hombre." Dijo una riéndose levemente debido a lo que acaba de contar

Por otro lado, los gemelos, solo se apoyaron en la pared mientras seguían escuchando mirando al suelo de forma fija, pero el primero en recuperarse fue Ren quien saco del trance a su hermano palmeando su hombro, paso de una mirada aturdida a una de decepción y confusión, pero al mirar a su hermano quien solo sonreía sintió que sus dudas desaparecían, sacudiendo sus pensamientos fueron a la tienda a comprar lo que querían.

Los años pasaban y los gemelos finalmente descubrieron que, tras nacer, su madre tuvo su depresión postparto debido a ellos y era algo que les carcomía la cabeza debido a que había niños que se los hacían recordar cada día cuando iban a la primaria, algo que comenzó un gran cambio para ellos, en vez de llorar como cualquier otro u culparse a si mismo, respondieron con golpes o respuestas que provocaban peleas masivas tanto sus amigos uniéndose como del otro lado hacia lo mismo.

A pesar de eso, intentaron alegrar el día a día de su madre sacando buenas notas, buenos comportamiento pero de vez en cuando había un llamado de atención por el lado de Akira, e incluso realizando buenas acciones como ayudando a los demás como tareas, cargando bolsas y demás pero todo cambio cuando su madre finalmente tenia que estar en casa debido a que su estado mental empeoraba, ahora medicada apenas podía levantar la comisura de su boca para sonreír o reír, sus ojos negros que apenas recordaban eran vividos y llenos de energía pero al ver su estado actual, su madre de aquel entonces desapareció.

Su padre quien de por si tenía una mecha corta, pero al menos sonreía y se divertía con ellos se esfumo, su carga laboral aumento al igual que su frustración, cansancio, estrés, energía, el solo quería llegar y descansar bien para estar optimo al otro día olvidando que tiene un vinculo con sus hijos y esposa, ahora sur prioridades bajaron, pasaron de ser esposa e hijos a trabajo y trabajo.

Incluso su personalidad comenzó a cambiar haciendo que gritara de forma constante a Ren y Akira incluso descargando su día con ellos mediante discusiones de forma unilaterales dejando que sus hijos absorban esa energía negativa, el padre que esperaban expectante que abriera la puerta trayendo frituras como papas fritas y palitos salados y jugar a juegos de mesa desapareció por completo, ni siquiera pueden reconocerlo.

Esto provoco que los gemelos solo permanecieran en su habitación que aun siguen compartiendo sin problema o incluso estar la mayor parte de la noche afuera de su casa debido a que recién a la medianoche su padre finalmente se iría a dormir en una cama separada a la de su madre debido a que ella ya no lo quiere mas cerca de su cuerpo.

Lo cual los muchachos solo se centraron en sus estudios intentando superarse entre si en vez de hacer sentir orgullosa a mama o a papa, pero aun así seguían mostrando sus notas con pecho al aire esperando algún día un elogio que nunca saldrá de sus voces.

En un 22 de febrero, el cumpleaños de su madre Ayumi y decidieron hacerle un desayuno casero al estilo a los gemelos, es decir, hacer un desastre culinario o lastimándose a si mismo, un café negro exitoso después de cuatro intentos, tostadas que casi se queman con mermelada, dulces de chocolate y un hermoso regalo con forma de taza diciendo "la mejor mamá de todas", al ponerlo todo en la bandeja y dirigirse a la habitación de ella, nunca olvidarían ese día.

Su madre apática después de tantos pensamientos comiendo su cabeza y pastillas de dosis fuertes ni siquiera los miró, sin embargo, no sabían que hizo que ella los mirara, pero notaron que tenia al fin una sonrisa en su rostro o al menos el intento de una debido a que los miraba no con apatía, sino que con todas sus fuerzas ella estaba intentado como felicitarlos por el regalo, e incluso notaron que sus ojos apagados hubo destellos de amor y felicidad.

Y ni en su imaginación mas alocada hubieran previsto lo que hizo su madre, como si tuviera un ataque de furia, Ayumi golpeo la bandeja que había puesto el desayuno a su madre, el café negro caliente se derramo sobre Ren alcanzando una parte de su rostro, pero por suerte el resto fue hacia su ropa, por otro lado, Akira, vio como tenia heridas abiertas, pequeñas, pero para él fueron un gran dolor dentro de su pecho.

Akira quien sentía un gran dolor en el pecho apretó los dientes con enojo mientras su cara tenia marcada las venas de la frente y de la sien, sus ojos se pusieron rojizos debido a lo hizo su madre, pero aun así comenzó a limpiar el desastre que causo, Ren con tristeza ayudo a su hermano, quien solo tenía una expresión ilegible.

Ese fue el primero ataque de los tantos que tuvo su madre y al ser un pequeño pueblo, en poco tiempo se enteraron todos algunos dijeron la verdad y otros la diversificaron para hacer chistes y que algunos malinterpretaron como verdad, ahora al ser lo nuevo de que hablar escucharon las voces bajas que iban a su dirección, como los señalaban, los insultos de tener una madre así, la suerte que decían tener de no estar en sus lugares, todo.

Esto afecto a los muchachos de muchas maneras, pero por fuera no dejaron que eso les afecte debido a que el primer rastro de sangre y los tiburones harían un gran lio, ellos esperaban una reacción de ellos para tener una justificación de su hablar e incluso llegando a hablar de ese tema en clase.

Incluso sus amigos dejaron de serlo debido a que la mierda podría llegar a tocarlos, poco a poco y después ninguno quedo dejándolos solos ante eso, haciendo que los gemelos Amamiya comenzaran a recordarlo y guardarlo en su corazón, pero se dieron cuenta que eso solo los cansaban y les hacia perder tiempo pensando en lo que hicieron.

Por dentro, sus emociones se transformaron en sentimientos como dolor, tristeza, odio, frustración, desamor, pero otras también aparecieron como frialdad, seguridad, confianza, humor, realidad, carácter.

En poco tiempo estos dos muchachos se convirtieron en hombres a temprana edad, no como su padre.

Ellos transformaron su amor y confianza en ese adulto al que llamaban padre, ni siquiera se gastaron en dirigirle la palabra, algo que duraba por semanas incluso hasta que se reinicie la cuenta, él ni siquiera defendió a la mujer con quien se caso y enamoró, una mujer quien le entregó todo por entregar y dándole dos hijos sanos, ni siquiera la defendía verbalmente contra las mujeres que escupían veneno por su boca.

Solo se quedaba callado como un cobarde, el perfecto ejemplo de un mal padre y un mal marido, ese hombre que compraba regalos de la nada a su madre ya no estaba, ese padre quien jugaba a las escondidas y perdía a propósito ya no existe, ese padre que los despertaba con un gran desayuno ya no sabía a donde se fue.

En cambio, el que vino, ahora iba a los bares a beber sin parar y sin control cuando obtenía un día libre o un feriado nacional, esos cigarros que fumaba cada tantos años se volvieron comunes que incluso en invierno los gemelos tenían que abrir la ventana o comprar cantidades de sahumerios para quitar el olor, pero la gota que rebalso el vaso fue algo que rompió totalmente la relación.

Ren quien no podía concentrarse en los estudios fue a dar una vuelta por el pueblo, algunas veces trotando y otras partes solo caminaba, y tal vez cuando apago su televisor se dio cuenta que estaba en la zona turística del pueblo donde había moteles y hoteles, venir aquí siendo turista no significaba nada pero al local tiene un significado diferente, este lugar era sinónimo de las parejas que no podían hacerlo en sus casas debido a diversos motivos pero la mayoría de esos fueron sus padres que decidieron quedarse en casa.

Al haberse despejado un poco, decidió irse a casa además de que le había mandado un mensaje a su hermano de que iba para allá, pero su camino de regreso tuvo un giro de ciento ochenta grados cuando vio claramente a su padre, por un lado, entendió de que tenia necesidades con su madre, sintiendo un poco de asco solo se alejó sin embargo cuando observo con atención notó algo que le hizo fruncir el ceño profundamente.

Cuando Ren vio a su padre entrar con la mujer, los dos se reían en el camino y cuando apenas se abrió la puerta ella fue directa a los labios de su padre, tal vez por un lado Ren pensó que él no era su padre pero para sacarse la duda por lo que vio, fue hasta la ventana que por suerte ellos estaban en el primer piso, incluso afuera de la ventana los escucho teniendo relaciones pero todo fue confirmado cuando vio el rostro de su padre besando a la mujer mientras ella decía su nombre entre gemidos.

Ren se alejó con expresión oscura mientras las venas de su mano y brazos comenzaron aparecer de forma visible, incluso su rostro tenia micro espasmos debido a la furia que sentía por dentro, su propio padre traiciono los votos que juro cumplir enfrente de su madre, enfrente a mucha gente, sin embargo, se dio cuenta que esos juramentos fueron solo teatro, algo banal, algo que se puede romper de una manera tan simple sin haber consecuencias.

Si no fuera de que Ren fuera fuerte tanto en carácter como de fuerza física, vio a su hermano menor colapsar entre llanto y furia, incluso él tuvo que tardar un buen rato tratando de detener de que su propio hermano haga parricidio a su padre, los dos llorando de la impotencia, vergüenza y furia que tenían tardaron días en aceptarlo, y cuando tuvieron la valentía de contarle a su madre, su vida una vez mas dio otro giro y esta vez para peor.

Cuando el dúo le conto la infidelidad de su padre a su madre, al principio pensaron que no les iba a creer o apenas reaccionaria debido al entumecimiento de su condición mental pero últimamente cualquier cosa fuera de su lugar en donde estaba o alguna noticia que encontraba como frustrante la volvía completamente loca o fuera de sí, sin embargo, esta noticia lo llevo a un nuevo nivel.

Lo primero que notaron fueron dos líneas lagrimas que no paraban de salir y aun así no se movía, pero después su rostro fue cubierto por sus dos manos mientras comenzaban a gemir del dolor que sentía de la traición de su marido, ella tenia la sospecha por como se comportaba cuando estaban hablando a solas o si realmente si sus charlas eran una debido a que solo se quedaban callados.

Sin embargo, sus pensamientos de tristeza y traición se convirtieron en negación absoluta y su forma de desquitarse estaba en sus habitaciones, ella comenzó a golpearlos, insultarlos, escupirlos, pero ellos se mantuvieron callados mirando al suelo ante lo que soportaban, si antes esto apenas se consideraban un hogar, ahora era solo un techo sobre sus cabezas. El abuso físico y psicológico se volvió el pan de cada día, pero al menos su madre sale de su habitación, ya que al menos se toma el tiempo de insultarlos.

Ahora su hogar ya no era lo mismo, podría decirse que ahora la escuela o la calle misma era su verdadero hogar, ante estos sucesos continuos en sus vidas no hizo que la amistad o amor entre ellos fluctuara o menguara en lo mas mínimo, por mas golpes, decepciones, insultos, decisiones, acciones, rumores jamás hicieron mella en la relación que tenían entre ellos.

Al menos lo único que podían considerar verdadero o que era algo seguro era la sonrisa que el otro daba era real, con el correr del tiempo infernal que pasan en este pueblo, las bromas que hacían de sus situaciones los hacia reír fuertemente e incluso siguieron jugando a ser héroes de la justicia.

A pesar de sufrir el peor de los abusos diarios en su casa llegando al punto de llorar en el hombro del otro no permitieron que sus valores arraigados en ellos los haga no actuar cuando ven una injusticia ante ellos, no les importaba los rumores, investigarían si hace falta para saber si alguien estaba siendo golpeado o recibiendo insultos, defenderían aquel sin voz como prometieron cuando eran unos simples niños.

Niño, adolescente o adulto, incluso si decían las típicas palabras de consuelo, prestaban sus oídos y daban atención a los problemas ajenos a ellos, debido a que permitían que su concentración estuviera puesta en ellos en vez de a si mismos, en otras palabras, ellos se decían a si mismos que era un ganar y ganar.

Esto les provoco muchos problemas, desde hasta niños que los acusaron con sus padres, pelearse con otros a golpes o incluso usando objetos, e incluso ancianos que los tienen entre ceja y ceja debido a como se inmiscuían en la vida ajena algo que no les gustaba.

Donde todo comenzó fue en la escuela primaria de Genji Roku de su pueblo, cuando habían comenzado a tener una reputación de ser un buen oído a los problemas ajenos, como si fuera algo natural contar tus problemas cuando estabas con alguno de los dos.

Y como si fuera el destino, nuevamente la vida de los gemelos que iban con trayectoria tranquila fue donde la escuela menor Nori pasaron de ser los "oyentes" a los "problemáticos", los insultos se fueron a mayores debido a que a la escuela a la que iban los niños de años mayores descubrieron todo sobre ellos y con ello comenzaron a influenciar a los compañeros de clase de Ren y Akira.

Llegando incluso a menospreciarlos de arriba abajo, pero todo tiene un límite, ya que ahora no decidieron callarse como antes, ya no mas iban a soportar porque sabían que a través de todo lo que vieron y escucharon que pasaría si dejaban insultarse así sin responder, algo que vieron de primera mano tanto en niños como en adultos.

Y hoy fue uno de esos tantos días, días que demostraron que si a alguien le gusta el durazno tiene que bancarse la pelusa.

"oe Akira un pajarito me dijo que te gusta Moe-san" dijo Kaito un compañero de clase de Akira, él tenia el pelo castaño corto bien peinado con ojos marrones, su expresión era de sarcasmo y de burla, incluso molesta debido a que la niña llamada Moe siente algo por Akira, pero ella no sabia que era reciproco y tampoco sabia lo que le iba a contar, sea verdad o mentira.

 "Sería una pena que alguien le cuente ¿no? A-ki-ra" dijo con un gran tono burlón, pero él no tuvo reacción esperada de su compañero, él con su pelo blanco y ojos celestes siempre fue el primero en llamar la atención que el resto, primero en los estudios, primero en educación física, primero en todo, tal vez sea tiempo de que por primera vez sienta lo que tenerlo contra las cuerdas con la niña que les gusta.

Kaito lo miro con ojos furiosos debido a que nunca reaccionaba cuando lo insultaban excepto por un tema y diciendo de forma venenosa. "Akira también escuche que tu papá está con alguien de bien, ósea mentalmente ¿Qué dices Akira? Él tomo una buena decisión, tu madre no sirve para nada, no tiene dinero, ni emociones, apenas les hablan a ti y tu hermano."

"En verdad ella le haría un favor al mundo suicidándose o algo así" dijo Kaito, pero Akira aún seguía escribiendo las respuestas en su cuaderno con tranquilidad, sus ojos no mostraron fluctuaciones o muecas en su rostro, haciéndolo enojar aún más por dentro, pero al final terminó tocando un nervio. "También sería una pena que tu herman-"

Y antes de que termine o incluso cuando trató de comprender lo que pasaba, su lado izquierdo del rostro recibió un golpe directo de Akira, pero Kaito en vez de llorar o armar una escena no sintió el más mínimo de enojo, él finalmente había descubierto la debilidad y tal vez del chico más llamativo de la escuela Nori.

Pero cuando se tocó la mejilla izquierda sintió algo flojo, dos muelas blancas como la leche estaban manchadas con sangre, él ahora si estaba enojado, pero cuando estaba a punto de reclamarle a Akira vio como su mano derecha volviéndose más blanca de lo que era y al mirar su rostro tuvo miedo.

Aunque no había signos obvios de molestia o enojo sus ojos celestes prístinos decían más que mil palabras, Kaito sintió esa mirada como la de una serpiente, se dijo a si mismo que cuando lo vuelva insultar debería de traer a sus amigos para al menos darle una paliza que no olvidaría.

Desde ese día, las peleas se volvieron comunes para los gemelos tanto físicamente como hablando o mas bien defendiéndose. Lo cual llevo a que Akira sonreír con maldad algo que Ren estaba acostumbrado a ver debido a que eso significa que vio una especia de vacío legal en cada juego que hacían desde juegos de mesa hasta los inventados.

Entonces Akira susurrándole en el camino en dirección al patio debido a que ahí hacen las actividades físicas, provoco que incluso el propio Ren quien tiene una paciencia casi inagotable también sonriera con picardía, ellos no solo eran niños de cara bonita, sus estudios eran de primera tanto que tuvieron que separarlos de clases debido a que peleaban incluso por la caligrafiá o la letra bonita.

Desde entonces se convirtieron en los primeros de sus respectivas clases y fue mas de lo mismo con lo físico, primero en todo, siempre destacaron, mucho mas que el resto, en pocas palabras el resto estaban mas cerca del tercero que del segundo puesto debido a que no se podía compartir el puesto. Desde entonces ellos abusaron de su poder físico para devolver todas las agresiones verbales y físicas dentro del marco de la clase llegando incluso pedir perdón enfrente de todos con una sonrisa, una sonrisa llena de sarcasmo y algo que todo notaron.

Cada oportunidad que tenían para dejarlos en el suelo fue utilizada, baloncesto, voleibol, futbol, gimnasia, educación física, juegos físicos, handbol y demás, con la justa y fuerza necesaria para molestar y menos del mínimo para no tener un llamado de atención.

Debido a esto, numerosos padres presentaron una queja, pero su excelente comportamiento que muy pocas veces tienen un desvió, su excelente rendimiento académico que es constante y nunca hubo un bajón de rendimiento en ellos hicieron que el subdirector y director de la escuela Nori los defendieran, lo único que podían hacer es que tengan mas cuidado cuando se trate de actividades físicas.

Desde entonces ellos fueron mas de acciones en vez de palabras, pero sus valores se mantuvieron a pesar de los constantes ataques o por la forma en que respondían, lo que estaban haciendo era el limite de lo que querían hacer ya que si lo sobrepasaban y los lastimaban enserio, los gemelos pensaron que no serian mejores que ellos de aquellos que se burlaban de su situación.

Durante el camino a casa, descubrieron que una vez más su carácter estaba a punto de ponerse a prueba como siempre.

Estirando su cuerpo ya alto, Ren bostezaba mientras se cubría la boca a la vez que volvía a poner sus manos en los bolsillos de su pantalón. "si seguimos así con nuestras y comportamiento -mientras miraba burlonamente a su hermano- finalmente podemos conseguir ir al Shujin Akira." Dijo Ren mientras devolvía la vista al frente. "no me mires así, como si siempre buscara los problemas del aire, solo es cuestión de aguantar un poquito mas y finalmente nos largamos de este pueblucho." Dijo Akira con mirada molesta a su hermano, debido a que su comportamiento era mas respondón que el de su gemelo de pelo negro.

"espero que, con esto, mamá pueda ser una persona normal -mientras suspiraba cansado-, ya quiero ver su rostro cuando vea las becas que estamos por conseguir para ir a Tokio." Dijo Ren con emoción al final debido a que irían a la gran ciudad que estaba a horas de ahí. Pero cuando Akira quería hablar escucharon sus nombres nombrarse por una chica de su edad que estaba detrás de sus espaldas.

"disculpen ustedes son ¿Akira-san y Ren-san?" dijo la chica con firmeza, pero cuando se dieron vuelta vieron que estaba nerviosa y acompañada por otra chica de su edad además de que tenían el mismo uniforme que ellos. "sí lo somos ¿Qué necesitas?" preguntó Ren con amabilidad y ella cuando vio su rostro se puso roja y nerviosa. "¿R-Ren-san… Q-Quieres salir algún día a comer?" dijo ella casi gritando.

Ella había practicado por días en el espejo y semanas para reunir el valor para hablarle no solo al chico mas popular de la escuela sino incluso el mas fuerte lindo de todos (a sus ojos), pero ella se dio cuenta que incluso alguien como él se sonrojó debido a su petición, pensando que la iba a rechazar cerró los ojos con fuerza. "Y-yo huh… supongo que sí, pero al menos ¿P-puedo saber tu nombre?" dijo rascándose la nuca y al hacer esto provocó que ella mirara fijamente el brazo musculoso de Ren.

"S-si! Soy Kasumi Keiko, somos del mismo año, pero de diferente clase." Dijo ella recuperando un poco la confianza y el hablar normal, ella estaba usando el uniforme del colegio y tenia el pelo negro con ojos marrones claros y cuando estaba a punto de hablar, de la nada Akira no perdía de vista a la otra chica dijo.

"¿Por qué me miras tanto? ¿acaso te confundo?" dijo sin expresión mientras miraba a la chica de su edad, ella rápidamente se sonrojo y se echo un poco para atrás mientras levantaba los brazos, ella tenia los ojos los verdes y el pelo castaño oscuro, Ren aceptando su destino cerró los ojos y estaba preparándose una respuesta agresiva pero no esperaba lo que respondió a Akira.

"¿P-pensabas que acompañaba a Kasumi para apoyo moral? Es obvio que iba decir lo mismo que ella para ti… idiota" dijo lo último susurrando, pero lo suficientemente fuerte para que todos lo entendieran, haciendo que Akira se pusiera nervioso e incluso hubo un pequeño rastro de sonrojo en sus mejillas. "soy Megumi Ayano… supongo que el idiota de los dos… debes ser tu ¿A-Akira-san?" dijo ella desviando un poco la mirada debido por como la mira de forma fija haciendo que siente un poco de vergüenza.

Kasumi recuperando la confianza debido al desvió de la conversación, finalmente comenzó a decir lo que le iba a proponer originalmente a los gemelos. "Ren-san y Akira-san ¿Qué les parece te-tener una cita doble con nosotras?" dijo con rostro completamente rojo, los gemelos al escuchar esto se sorprendieron por completo, ya que esto ni siquiera se les cruzó por la cabeza.

Pero el primero en responder fue Akira a que estaba un poco mas acostumbrado que Ren debido a que la mirada que él tenia era mucho mas fulminante que la de él. "Kasumi-san, no hay problema, pero ¿A dónde deberíamos ir los cuatro?" dijo mirándola con expectativa y una sonrisa amable.

A partir de ese momento sus vidas o al menos un parte de ellas cambiaron para bien, ese emoción fugaz cuando se conocieron fueron paso a paso convirtiéndose en sentimientos fuertes y duraderos, la respuesta de Akira los llevo a un mundo donde el amor o el de que alguien guste de tu persona los hacia sentir raros, era muy diferente del amor de una madre, debido a que el de pareja en un proceso mutuo tanto en crecimiento individual como de compañerismo, no solo es condicional sino que cada acción hay una reacción y consecuencia, haciendo que no solo madures sino también responsable de tus acciones y afecto hacia tu pareja.

Aunque su primera cita fue doble, al tener alguien de confianza, tener la misma edad y tener varias cosas en común hicieron que las conversaciones fueras alargadas, pero a la vez divertidas haciendo incluso que fueran a sus casas hasta muy tarde llegando incluso amanecidos a la escuela al día siguiente.

Diferentes sitios fueron visitados pero esta vez siendo solo un par, plazas alejadas del pueblo, lugares turísticos de Yamagami, el rio, la arboleda, los parques naturales y de atracciones, heladerías, sitios para almorzar, cada día que pasaban parecían cortos e incluso si estaban juntos toda la vida parecía quedarse corto, y ellos cada vez fueron mas atrevidos, pasar de estar cerca uno del otro a agarrarse de la mano y darse abrazos para ahora estar dándose besos en secreto y tocarse entre sí.

Hasta que Megumi la primera en atreverse a llevar a Akira su casa cuando sus padres tenían que ir a la gran ciudad de Tokio, ella con la cara roja lo invito a su habitación y sin miedo, los dos comenzaron a desvestirse, las manos de Megumi recorrían el cuerpo definido de Akira y se detenían en sus anchos hombros, mientras que Akira veía los hermosos ojos verdes de ella y tocaba su espalda desnuda. Esa noche se volvieron uno solo.

Por el lado de Ren y Kasumi fue más de lo mismo, pero más despacio, cuando estaban en la casa de ella fueron despacio y con tranquilidad, bebieron café debido a que querían bajar los niveles de hormonas que tenían en sus cuerpos que el cualquier momento explotaban, y cuando llegaron a la habitación, Kasumi no pudo resistirse más, saltando sobre Ren rodeó su cuello con sus brazos y sus piernas a su cintura, él por su parte la agarró de las pineras mientras iban a la cama.

Esa noche Kasumi dijo que quería la casa a solas debido a que querían hacer una noche de chicas y quería ocupar la casa entera, lo cual sus padres aceptaron debido a que su rendimiento académico había aumentado gracias a su novio que aun era un secreto de ellos dos.

Con desesperación los dos se sacaron las prendas que tenían puestas mientras se besaban con fervor y deseo, Kasumi tanteaba cada musculo de la espalda de Ren que era ancha y bien marcada sin hablar de como era su torso y hombros, al tener un hermano que hacia que dieran el cien por ciento tuvo sus ventajas ya que el perdedor tenia que cumplir un favor del otro.

Ren por su parte a pesar de ser un poco más tímido que Akira, cuando estaba con Kasumi a solas en la oscuridad se volvía muy atrevido y en esa noche lo fue aún más.

Sus vidas fueron un poco oscuras al principio, pero ellas hicieron que sus vidas fueron mas llevaderas e incluso hicieron que os días se volvieran buenos días.

Sin embargo, el día celeste se volvió gris nublado

En el presente día, los gemelos descubrieron que es mejor disfrutar el presente que el futuro debido a los tantos giros que tuvieron, pero este fue uno tan abrupto, tan brusco, tan de la nada no sabían como reaccionar haciendo que se dejen llevar.

Su casa ahora mismo que estaba en un silencio incomodo donde Ren estaba preparando la cena para él y Akira, algo simple para llenarse e ir a acostarse temprano debido a que mañana irían a la casa de Kasumi a estudiar de forma grupal, pero de la nada, como si quisiera una excusa para pelear, su padre Hiroshi comenzó a gritar.

"¡¿acaso no pretenden cuidar a su madre?! ¡solo le pasan todos los días diciendo que van a estudiar afuera, como si no notara que tuvieran novias, mocosos de mierda! ¡estudiar esto, estudiar lo otro! ¡¿acaso no saben nada mas que estudiar?! Su madre solo se levanta si no es solo para golpearme, apenas tengo-" pero sus palabras fueron interrumpidas por Ren quien ya se cansó de escucharlo.

"Entonces ve TÚ a la escuela, saca nuestras notas, repasa cada día, cada materia, responde correctamente las preguntas, estudia cada vez que puedas cuando tengas un rato libre ¡¿acaso crees que nuestro promedio se mantiene con alcohol y cigarros?! ¡NO! En cambio, el señor "no tengo tiempo para mi" solo sabe gastar y gastar el dinero que entra a esta casa en estupideces." Respondió con energía.

El visiblemente molesto estaba respirando de forma muy exasperada y había cerrado sus puños mientras apretaba los dientes, porque no hay nada mas horrible que tu hijo diga la verdad en tu rostro y tu no puedas decir lo contrario pero el saco la tarjeta de autoridad en la casa.

"¡no te atrevas a responderme mocoso! ¡soy tu padre! A partir de ahora no podrán salir a "sus sesiones de estudios", solo irán a la escuela y se quedan acá" dijo con enojo a la vez que las venas de sus sienes se marcaban, pero esta vez fue Akira quien gritó. "TÚ no eres nadie para prohibirnos algo, nunca fuimos tu prioridad, solo quieres cuidarte a ti mismo, y como te descubrimos que sos un puto infiel de mierda te comió la consciencia y recién ahora estas cuidando de mamá, en la primera oportunidad que tuviste fuiste con una mujer que incluso ella te dijo que no servías para nada, se deshizo de ti tal como hiciste con mamá."

"TÚ madre tuvo la culpa de no soportar un simple parto y seguro que ustedes-" pero sus palabras detenidas debido a que Ren con enojo evidente en su rostro y mostrando los dientes por la rabia que tenia, dio un golpe con su puño izquierdo que impacto directo entre la nariz y el mentón.

Hiroshi se había dado cuenta de que lo golpearon porque estaba en el suelo en un segundo y con sangre expulsada de su nariz y boca mientras sentía como tenia los dientes partidos, confundido y aturdido vio como su hijo mayor de pelo negro y ojos grises oscuros respiraba agitadamente y su mano izquierda goteaba sangre de los nudillos debido a la fuerza que hizo para romperle la boca y de la nada se fue a la entrada principal y mientras corría agarro su bolso escolar y detrás de él su gemelo Akira lo seguía.

Vio como sus dos hijos corrieron y solo pudo rugir de la ira que sentía porque su hijo mayor tuvo el atrevimiento de golpearlo y discutir con él, por su parte le rezo a todos los dioses que conocía para que les suceda algo a sus dos hijos en el camino, no le importaba si los mataban o morían por un accidente, e incluso juro que ayudaría a hundirles la vida.

Mientras corría con velocidad, Ren sintió un gran agarre en su bíceps derecho y vio que era su hermano quien no tenia su bolso como siempre. "¡calmate Ren, no vale la pena pensar en ello!" y Akira vio como su hermano se le fruncia el rostro mientras intentaba frenar las lágrimas, pero fue en vano, estas recorrían su rostro mientras que Akira lo abrazaba y Ren solo lloraba en su hombro, a la vez que el menor de los dos le daba palmadas en la espalda esperando a que se calme un poco.

Los minutos pasaron y Akira noto que su hermano se relajo un poco. "listo amigo ¿ya te calmaste? -mientras se estiraba- hoy hace un lindo día para caminar ¿Qué dices?" dijo aligerando el ambiente mientras que revolvía el pelo de su hermano mayor mientras escuchaba a su hermano hablar. "es que no puede ser así Akira… E-es nuestro padre, habla de mamá como si fuese una carga y ya ni siquiera quiere conseguir un trabajo, usa la asignación de mama por su enfermedad para estupideces" dijo frustrado mientras hacia gestos en el aire.

"lo único que podemos elegir es a las personas con quienes nos relacionamos en cambio la familia no -mientras suspiraba cansado- yo quería un padre rico y ver partidos de futbol todo el día, peeero me toco un papá patético, pero no pasa nada, porque tengo a mi mejor amigo justo aquí." Dijo sonriendo Akira mientras agarra del cuello con su brazo a su hermano.

"supongo que la familia de la calle si podemos formarla, al menos tenemos a Megumi y Kasumi, ellas son las únicas con las que podemos ser nosotros mismos -pero mirando a su hermano notó que sonreía orgulloso- bueno casi, creo que Megumi la esta pasando mal contigo." Dijo riéndose un poco mientras se secaba los ojos.

"¿huh? ¿Qué quieres decir? Yo no tengo gustos extravagantes, solo miro futbol -pero su hermano comenzaba enumerar las ligas que veía- lo que estas haciendo es un poco exagerado… ¿en realidad piensas que Megumi no le gusta el futbol?" al ver la confusión de hermano, Ren solo pudo reírse ligeramente, mientras que Akira lo miraba con enojo y exasperación.

"pero da igual, ellas son las únicas que sentirán orgullosas al ver que finalmente nos falta poco para las becas del Shujin, y cuando lo logremos haremos -pero sintió una mirada mortal de su hermano- ¿Por qué me miras así? Haremos una fiesta." Al ver la expresión de Akira, Ren se puso rojo mientras apartaba la vista, Akira al ver esto se río fuertemente.

"cuando estemos en Tokio afuera los problemas, insultos, rumores, nadie nos conocerá ahí, nadie nos juzgará y tal vez incluso comencemos a trabajar y conseguir un hogar o departamento e invitar a las chicas." Dijo Ren mientras seguía charlando con su hermano, pero de la nada vio como su hermano se quedó parado mientras fruncia el ceño.

Ren a punto de hablar vio como su hermano tenia un dedo en sus labios y cerro los ojos, poco a poco los dos captaron el ruido y concretamente eran gritos. Los dos fruncieron el ceño ante y fueron ante el ruido, poco a poco comenzaron a discernir lo que decía y al parecer no estaba sola.

Al girar por una esquina, vieron a lo lejos a una mujer siendo forzada por un hombre, al acercarse mas finalmente captaron las palabras.

"¡Entra en el auto mujer, no hagas que me enoje!" gritó el hombre y ella rápidamente le dijo que no, pero él dijo." No vengas con estupideces mujer, entra al auto" dijo el hombre claramente borracho.

"ey! Déjala en paz" grito Akira, pero Ren fue quien se movió a separar a los dos individuos, pero mientras se acercaba escuchó. "me haces gastar el tiempo ¿Quién eres para causarme problemas?" pero ella rápidamente respondió tartamudeando "lla-llamare a la policía" dijo con claro pánico.

"llámalos si quieres, los jefes de policía son amigos míos, harán la vista gorda por una simple civil" pero sus constantes forcejeos y palabras fueron detenidos por la sirena de una patrulla y entre murmullos dijo "alguien llamó a la poli ¡ja! Súbete al auto de una maldita vez golfa ¡Personas necias e incompetentes deberían de cerrar el pico y seguirme como su capitán de este país!" dijo el hombre.

Pero el hombre al mirar al costado por un segundo notó a dos jóvenes, pero su borrachera no pudo identificarlos o incluso discernir sus facciones porque veía doble sin embargo aun así dijo. "¿Qué miran ustedes? Lárguense de mi vista, esto no es un show que pueden mirar ¡lárguense!" pero cuando el hombre quiso avanzar se tropezó con su propio pie y termino golpeando la acera con su cabeza haciendo que salga sangre.

Los gemelos vieron que fue una pequeña laceración, pero cuando estaban a punto de decir que la mujer se valla, la patrulla finalmente y cuando estaban a punto de explicar la situación, el hombre calvo, con barba de chivo pequeña y con lentes amarillos habló rápidamente.

"¡ustedes! ¡Arresten a estos idiotas, me golpearon! ¡Mírenme! ¡Ustedes los demandare!" dijo furiosamente mientras se movía erráticamente y hacia gestos en el aire mientras se agarraba la herida en su cabeza.

"¿con que testigos cabeza de rodilla?" dijo Akira furioso debido a las palabras del hombre y como decía todo eso al aire libre.

"realmente eres un niño" dijo el hombre calvo dijo con sarcasmo como si esperara esa respuesta.

"oigan ofici- ¿Qué hacen? ¡Arréstenlo a él, quiso obligar a esa mujer a subir a su auto!" dijo Akira, pero Ren dijo. "ey! ¡Señorita dígales a los oficiales la verdad! ¡La estaban obligando a que suba al auto!" dijo el mayor, pero la mujer al ver la expresión del hombre calvo bajó la cabeza y dijo palabras impactantes a los gemelos.

"es mentira, oficiales, estos dos jóvenes quisieron agredirnos, estábamos a punto de ir… a una fiesta organizada por el señor Shido." Dijo la mujer y como si fuera un ultimátum, los oficiales llevaron a los jóvenes a la patrulla en dirección a la estación, mientras que el calvo llamaba a uno de sus abogados para que maneje la situación.

Los dos gemelos shockeados, solo quedaron con los ojos abiertos y sin entender la situación, pero rápidamente volvieron en sí cuando los separaron en dos habitaciones diferentes, y cada una tenía una mesa y silla de metal junto con un gran ventanal y una cámara de seguridad en una esquina.

Ellos vieron que las cámaras tenían un punto rojo y de la nada se desvaneció dando entender que se apagó y vieron a un hombre entrar a donde estaban.

*con Ren*

"UGH *tos**tos* te estoy… diciendo la verdad. ¡No le hicimos nada a ese hombre!" dijo jadeando por aire y aguantando el dolor de su cuerpo y rostro. Su rostro magullado y su cuerpo moreteado por todas partes daban signos claros que estuvo así por varios días.

"solo di la verdad chico, intentaron agredir a esa pareja e incluso lastimaste al hombre en la cabeza" dijo con voz mecánica el oficial quien dejó su uniforme superior y mostraba los músculos de sus brazos y el saco de boxeo era Ren.

"no lo hagas más difícil muchacho, solo di esas palabras y esto terminara" dijo el hombre

"y dejar que estúpido calvo se salga con la suya ¿dime oficial, te duelen las rodillas?" dijo el muchacho con rostro burlón con una sonrisa sarcástica.

Pero su chiste llevó que el hombre lo siguiera golpeando con más fuerza y velocidad.

'¿Por qué? ¿Qué gana ella? ¿Akira estas bien?' se dijo a sí mismo el muchacho mientras soportaba otra tanda de golpes del oficial.

*con Akira*

"vamos amigo, mi madre tiene apatía y golpea mejor que tú" dijo Akira con una sonrisa provocativa mientras la sangre goteaba de su barbilla, tenía un ojo morado y en las comisuras de sus labios salía sangre.

El hombre mientras tanto al escuchar la burla golpeó aún más fuerte haciendo que el aire del joven de pelo blanco saliera de golpe, haciendo que sus ojos se abran.

"seguramente tu hermano ya habló, solo ríndete mocoso" dijo el hombre con claro signos de cansancio.

"…" murmuró Akira haciendo que el hombre se sorprenda un poco.

"¿Qué dices?" dijo el hombre acercando su oído a la boca del joven.

"que sabes realmente como chupar una poronga no como tu hija" dijo y aprovechando el shock del hombre escupió saliva con sangre en el rostro del hombre.

Y este reaccionó golpeándolo aún más fuerte.

Los gemelos ya habían perdido el sentido del tiempo, no sabían pasado días o semanas, pero de un momento a otro cuando sus heridas finalmente desaparecieron, su siguiente parpadeo fue en estar con un abogado que decidió defenderlos y al instante siguiente estaban ante un tribunal, pero eso no fue lo más impactante.

Todos los que conocían vinieron a hacer testigos de comportamiento, persona por persona subían al estrado mientras ellos miraban estos con ojos calmados, ya habían aceptado lo que estaban viendo, compañeros de clase, profesores, estudiantes, personas comunes e incluso esa mujer de aquella noche.

E incluso su propio padre fue al estrado a perjudicarlos, silaba por silaba, palabra por palabra, todo lo que tenia guardado se lo saco y su boca solo salía veneno, tanto que si alguna vez se muerde accidentalmente se moriría solo, pero por suerte el abogado que tomo el caso comenzó a encontrar incongruencias, detalles, datos, pero no pudo hacer mucho, lo mejor que pudo obtener es una condicional de un año en la prestigiosa academia Shujin.

Al escuchar esto el juez, al ver el historial académico y de conducta, decidió darles esta oportunidad debido a que es su primer delito en su registro, entonces dio el caso cerrado, un año de condicional donde se hará efectiva donde el momento que se encuentre un tutor responsable de ellos en Tokio.

El abogado al ver esto, supo que había algo tras las cortinas, es como si fueran un programa de televisión, cada persona que entraba echaba mas mierda que la anterior a estos jóvenes, sintió curiosidad cuando llegó este caso a su teléfono apenas había despertado ese día, parece habían molestado a la persona equivocada debido a que incluso vio las facciones del juez dudando si iban directo al reformatorio o darle la condicional.

Cuando los miró sintió lastima por ellos, solo miraron al suelo con mirada fija y en blanco, ya ni siquiera se gastaron en mostrar expresiones, solo caminaron con la cabeza cabizbaja mientras eran guiados por los guardias.

Mientras guardaba los documentos de la mesa, notó que el apellido de la madre de los gemelos le resultaba familiar, cerrando los ojos trato de recordar hasta que finalmente entendió de donde venia, al abrir su celular con su huella dactilar fue rápidamente a sus contactos, y vio el nombre que recordaba, sino fuera por el nombre Ayumi Yamamoto y relacionarlo con Sojiro Sakura nunca hubiera podido encontrar un tutor rápido para estos chicos.

"Ayumi idiota… ¿Por qué no me llamaste si estabas mal?" murmuro Kenta, el fue un antiguo novio de Ayumi y fue el propio Sojiro quien hizo de casamentero cuando aún eran jóvenes e iban a la universidad, pero estos dos la dejaron a mitad de camino e hicieron sus propias vidas.

"si hubiera prestado mas atención, estos muchachos saldrían para cuando terminará el juicio… lo siento Ayumi te falle…" murmuró debido a que estaba en la espada y la pared, un caso relámpago, muchos testigos, algunas incoherencias, era obvio que este juicio estaba amañado, molesto solo se tapo los ojos con la mano mientras se apretaba el rostro.

Poco después Sojiro Sakura alguien con mantenía contacto algunas veces, finalmente respondió.

Mientras tanto los gemelos les permitieron tener celda compartida mientras esperaban encontrar un tutor, los dos solo se sentaron mirando un punto fijo mientras apoyaban sus brazos en sus piernas a la vez que miraban al piso, Akira por su lado apretó las manos tan fuertes que la sangre comenzó a salir.

Ren por su lado comenzó a aguantar la furia que estaba a punto de salir, las venas de su cuello comenzaron a salir y comenzó a apretar los dientes del enojo, para cuando los dos se calmaron y dejando un silencio incomodo, su gemelo menor comenzó a resoplar divertido para poco rechistar.

El gemelo mayor copiándolo para poco después comenzaron a reírse a carcajadas mientras las lágrimas que salían de sus ojos no se sabia si eran de felicidad o tristeza, pero sus risas fueron sinceras, ahora lo aceptaron, incluso si su madre viniera de rodillas junto a su padre redimido pidiendo que vuelvan a casa, no lo harían.

Ya tuvieron suficiente de ser maltratados, con esta faceta del pueblo donde nacieron y se criaron los trataron así, ellos le harían la ley de hielo, no responderían llamadas, mensajes, e incluso cuando lleguen a tener sus celulares de nuevo lo iban a formatear de fabrica y cambiarían de numero para no saber nada ellos, ya era de dejar el nido que tanto daño les hicieron.

Al menos consiguieron entrar al Shujin, pero esta vez sin beca y nada menos con un amigo de su madre como tutor como guardián de condicional. Ahora él deberá informar dos veces al mes sobre su condición, pero ellos no esperaban que este giro superaría a los anteriores por completo, este era con diferencia uno que les cambiaria para bien sus vidas o para mal si es que deciden mal.

Y ahora estaban en el vagón yendo a Shibuya, concretamente Yongen-Jaya donde residía su tutor.